martes, 26 de febrero de 2008

un post muy personal

como parece que nadie me lee, aprovecho para dejar aquí mi desaliento, como tirándolo al viento, a ver si de casualidad algún desconocido lo recibe...

ayer después de 10 años en pareja, de un año separada, y de dos sin relaciones sexuales, tuve mi primer intento de volver al mundo de los vivos, de los que tienen libido y piel y carne... no resultó, me sentía extraña en mi propio pellejo, ajena en aquella casa extraña y junto a un cuerpo desconocido, me sentí vulnerable y desnuda, fragil, asustada y llena de frustración y pena....

no pudo ser, no fui capaz de recuperar mi cuerpo de mujer, aún lo retiene mi ser madre, y no lo suelta, y no consigo zafarme de ese rol casto y nutridor, y quiero volver a tocar y ser tocada antes de que mi piel se deshaga.... me siento tan seca y avergonzada...

sé que pasará el tiempo y me acabaré riendo de esto, pero también siempre tendré un poco de pena al recordar lo triste que me he sentido y me estoy sintiendo... si hay algo más cruel que el rechazo, es el arrepentimiento... y yo voy sobrada de ambos.

jueves, 14 de febrero de 2008

DECÁLOGO DE LA MUJER PERFECTA (SEGÚN LOS DICTADOS DEL PATRIARCADO)


  1. Amaré a mi hombre más que a mí misma y renunciaré a todo por amor verdadero. El amor verdadero es incondicional, amar significa renuncia, y el perseguir metas propias, egoísmo o irresponsabilidad.

  2. Estaré delgada (una talla 38 como máximo) por encima de todas las cosas. Pasaré hambre o me sentiré culpable cuando no lo hago. Odiaré mi cuerpo si no se ajusta al de una ninfa de quince años.

  3. No envejeceré nunca, y si lo hago, me operaré para ser siempre perfecta

  4. Me depilaré regularmente las piernas, las axilas y la línea del bikini con cera caliente, las cejas con pinzas, el bigote con andina; me gastaré un pastón en cremas antiarrugas, hidratantes, nutritivas, exfoliantes, reafirmantes y anticelulíticos, y en base de maquillaje, maquillaje, anti-ojeras, colorete, sombra de ojos, rimmel, pintalabios, perfiladores de ojos, y de labios y demás utensilios propios de mi sexo. Visitaré regularmente la peluquería o me teñiré en casa para ajustarme al presupuesto familiar.

  5. Valoraré el vello del hombre como muestra de su virilidad y sus michelines como parte de su encanto, sus canas son muestra de madurez y su calvicie, entrañable.

  6. Cuidaré de mis hijos en mayor medida que mi hombre porque solo una mujer que pare sabe lo que es ser madre… ellos son distintos.

  7. Una mujer liberada es aquella que es capaz de trabajar fuera a pleno rendimiento, lleva la casa de forma diligente, es una madre cariñosa y atenta y siempre está como un pincel de arregladita. Dormir, es prescindible. El ocio, innecesario.

  8. Mi sexualidad no existe, no tengo deseos, solo me excita mi marido, y soy sumamente pasiva ---------------o bien (esto depende del tipo de hombre que dicte la norma):
    8 bis. Me encanta el sexo invasivo, centrado en el coito y la penetración, me gusta el aquí te pillo aquí te mato, mi sexualidad se basa en la adoración y admiración por el pene, me encanta la felación (yo a mi pareja, claro), y que terminen en mi cara, si mi pareja así lo estima. La sexualiad del porno es mi modelo. No existe el clítoris, si mi marido no lo encuentra.

  9. La convivencia con mi hombre consiste en negociar, transigir… no entrar en conflicto, porque las mujeres somos muy perseguidoras, y eso, está muy mal. Jamás sacaré los pies del tiesto, más vale maña que fuerza…

  10. Las mujeres no nos asociamos, cuando nos juntamos nos convertimos en arpías. Aisladas y calladitas estamos más guapas. Dos mujeres juntas son akelarre...

jueves, 7 de febrero de 2008

¿QUE SIGNIFICA SER MUJER?

¿Existen rasgos intrínsecos a la feminidad que casi todas compartimos?

Soy mujer, y como tal, miro el mundo, y desde esa condición me acerco a él.

Como mujer, soy dadora de vida, potencialmente puedo engendrar, en lo cotidiano, vivo bajo la ética del cuidado, alimento y nutro lo que existe, y sin embargo, a veces padezco inanición crónica... porque como mujer parezco ser la única responsable de ese dar, mientras ellos se ocupan más bien de sí mismos... a nuestra costa.

Si la mujer es dadora de vida, podemos construir una cultura del cuidado, de la nutrición, del amor a todos los seres. La cultura patriarcal destruye.

Como mujer, vivo mis emociones, dejo que me traspasen, las observo, las comunico. Con otras mujeres esas emociones fluyen, se interconectan, se retroalimentan... Con la mayoría de hombres la comunicación emocional se atasca en vía muerta porque, o bien la exprimen, o bien la ignoran. El hombre vive "hacia fuera", su socialidad se basa en el éxito, en el logro, la emoción se encoge por falta de uso.

Si la mujer comunica y siente, podemos construir una cultura en la que el afecto pueda más que el logro personal, una comunicación en la que se contemple el bien común. La cultura patriarcal se basa en la imposición para obtener metas particulares.

Como mujer acepto mi soledad, cuando toca. Mi soledad se torna en compañera porque me escucho a mi misma, escucho las voces que me habitan, las que laten en las voces de quienes callan y las que braman en quienes rugen. El hombre busca compañeras constantes, para hacer de ellas su bastón, y nos doblan, al cargar sobre nosotras su peso.

Si la mujer se enfrenta a su soledad, construye una cultura basada en la compasión y la empatía por los que viven aislados, y tiende puentes hacia ellos. La cultura patriarcal es evasiva, se basa en antídotos efímeros, en el placer de lo inmediato.

Como mujer me reviso, me miro por dentro, procuro crecer, miro al pasado, al presente, dejo que vaya llegando el futuro, lo acojo, a veces lo persigo en forma de metas... El hombre ante la crisis emprende una huida hacia adelante, arramplando con todo, desoyendo al pasado, dejando cuentas pendientes.

La cultura femenina puede basarse en la continuidad, la patriarcal en la ruptura.

Como mujer reparto, distribuyo, comparto; el hombre se hace dueño de los bienes, los explota, los agota.

la cultura femenina se basa en el reparto y el compromiso mutuo, es una cultura solidaria. La patriarcal en el individualismo.

Como mujer dialogo, negocio, hago concesiones. El hombre impone o desoye las peticiones ajenas.

La cultura femenina construye, dialoga, es la cultura de la paz. La cultura patriarcal impone, es la de la guerra.



ME COMPROMETO A CONSTRUIR CULTURA DESDE MI MIRADA VIOLETA, DESDE MI PROPIO CENTRO Y HACIA LO QUE ME RODEA...

CURIOSO, PERO NO CASUAL

Es curioso, me he pasado años lloriqueando por lo sola que me sentía y nadie parecía captar demasiado el mensaje, y sin embargo, ahora que todo el mundo (bueno, muchos, no todos) me dice entre lamentos lo sola que estoy, es cuando menos sola me siento...

Es un cliché manido que se puede vivir muy solo en compañía, y viceversa, pero por lo mismo, es una verdad como un camión. Cierto es que sigo buscando la compañía de otros, sería utópico y enfermo querer la soledad absoluta, el aislamiento, pero ahora lo que busco es una cierta afinidad, por leve que sea, y siento en mi estómago que el hambre demencial que sentía no hace tanto se ha visto saciado...

Era como tener un pastel de chocolate a la vista y que te impusieran un régimen extremo que tú no suscribes pero no te queda otra, porque te niegan el alimento, y el acceso a él. Y ahí está el pastel, en tus narices, y tú con la lengua fuera... Y ahora me quitaron el pastel de delante, y me quitaron el bozal, y tengo un montón de fruta y ensaladitas y filetitos que como cuando puedo comprarlos, a veces me tengo que abstener, por fuerza mayor, pero nadie me impone desde fuera mi dieta.

En fin, una analogía simplona pero ilustrativa, así me siento. Todo está ahí y nada me manda ni me amarra.

Me aconsejan un cambio de vida, de lugar de residencia, me aconsejan la vuelta a lo conocido, pero yo de momento me quedo con la sorpresa, con sus carencias y todo, porque prefiero esta incertidumbre plagada de posibilidades que cualquier seguridad que me anude y me esclavice...

Solo el tiempo dirá, por ahora, con eso me basta.

miércoles, 6 de febrero de 2008

LA DIFERENCIA

Siempre me intrigó el porqué de la diferencia entre los hombres y las mujeres, me importaba el debate porque así podría lograr discernir como trascender esa diferencia, si es que era posible...

Por resumir, diré que llegué a una solución intermedia entre naturaleza y cultura, considero que lo cultural y lo biológico se retroalimentan, de forma que si un patrón cultural se repite lo suficiente, acaba transmitiéndose genéticamente a la especie, o por lo menos a los sujetos que viven en un ecosistema que se vea influenciado bajo esas mismas pautas sociales...

No soy científica, ni mucho menos, pero a la observación me remito.

Los niños son socializados en el logro, las niñas en lo emotivo, y en lo comunicativo, así desde hace siglos de siglos, ahora, en pleno siglo XXI en occidente, pese a la supuesta liberación femenina (de la que aún queda mucho por andar...) los niños aprenden a hablar más tarde que las niñas, son más competitivos, y las niñas comienzan a hablar mucho antes y son más empáticas. ¿Porqué? por eso mismo, porque sus cerebros están "especializados" en una u otra tarea, según toda la evolución histórica que se ha ido modelando en lo biológico a través de lo cultural.

Entonces... ¿cabe esperar que los hombres de una generación concreta evolucionen a un ritmo más rápido de lo que en biología sería razonable? ¿cuantas generaciones de educación y socialización son necesarias para cambiar un patrón de conducta tan sumamente interiorizado (desde los genes)?

Tengo un hijo varón, me hago estas preguntas porque para mi supone un tema clave el lograr contribuir a su desarrollo de forma armónica, en todo lo posible, y eso pasa por no hacer de él un macho degenerado, como muchos de sus congéneres (en sentido literal) pero sin coartar su masculinidad natural, sea la que sea...

Y me digo a mi misma, ¿y donde está el equilibrio? a falta de referentes claros, busco a ciegas un patrón masculino que me convenza, y como no lo encuentro, me limito a hacer lo único que está en mi mano, procurar estimular en él los rasgos que tradicionalemente atribuidos a lo femenino, así como respetar aquellos que podrían calificarse de masculinos, para que él mismo logre su equilibrio, y como todos los demás, se construya. Y así juega mi niño, un rato lo pasa bañando a su bebé y dandole la papilla y otro pateando el balón y arrastrando camiones... Y no, no creo que esté yendo contra su naturaleza ni lo esté "castrando" porque me prepare tortillas invisibles en su cocina de plástico...

Últimamente vivo en un mundo eminentemente femenino, apenas me relaciono con hombres, no es una elección pensada y decidida, digamos que ahora no me siento sintonizada con los hombres que tengo a mano, y añoro encontrar hombres que sean hombres y no machos, compañeros (no hablo de pareja) con los que vivir los días que van tocando, respetando su diferencia, respetando ellos la mía, sin jerarquías, sin opresión, sin resentimiento.

El hombre me ha defraudado, ojalá mi hijo me vaya enseñando que no todos son involucionados por naturaleza. O mejor, ojalá encuentre alguno que me devuelva la fe, porque perdiendo la fe en el hombre, también voy perdiendo poco a poco la fe en el ser humano, y eso si que no.

martes, 5 de febrero de 2008

RAZONES PARA EL ENTUSIASMO

  • Mi hijo precioso
  • Mi salud... gracias
  • Mi oportunidad para desanudarme de mis dependencias
  • Todo un mundo por descubrir, por explorar
  • Va llegando la primavera, luce el sol...
  • Recupero mi espacio físico, y mi espacio mental
  • Me libro de afectos mezquinos, para poder así quererme
  • Me reencuentro con el mundo, sin bastones
  • Cada momento que paso cosiendo un disfraz para mi pequeño, cada vez que bailamos, pintamos, jugamos a la pelota...
  • Cada risa, cada conversación
  • Cada amigo que encuentro
  • Cada noche que duermo con la conciencia tranquila
  • Cada amanecer
  • La curiosidad, el futuro que me espera
  • Cada hoy, cada aquí y ahora

lunes, 4 de febrero de 2008

Y AHORA, ME PERDONO A MI

bilis soltada, bilis controlada. ahora puedo perdonarme, para poder sanarme.

me perdono por haberme abandonado, por haberme postergado, por no haberme cuidado, por haberle puesto por encima de mi misma, por haber creído que amar era olvidarse de una...

me perdono por haber creído que ser generosa era renunciar, y ahora descubro, nunca es demasiado tarde, que entregar es dar lo bueno, sin dejarse vaciar...

me perdono por haber olvidado que mi dignidad estaba por encima de cualquier entrega, que con mi integridad no se transa, que mi primera responsabilidad era hacia mi misma.

me perdono por haberte odiado, el odio no me sana, trato de congelar mis emociones para que ninguna me destruya. ahora se trata de construir: construir mi templo sagrado, y tu mausoleo...

me perdono por olvidarme de mi y no saber cómo olvidarme de tí, me perdono por tropezar una y otra vez con tu imagen, y no tener presente que el tú que conocí ya no existe más, que ahora hay un tú que no era aquel, y a ambos he de deciros adiós.

me perdono por las veces que no soy capaz de llorar, y por aquellas en las que no soy capaz de contener el llanto cuando toca. me perdono por ser inoportuna.

me perdono por flaquear a veces, por dejarme tentar, por querer hacer concesiones a quien no las merece... me perdono por que este divorcio tan cansado me derrote a veces y quiera firmar cualquier cosa, olvidando que es mi niño el que pierde si lo hago. me perdono pero me afirmo en mi decisión de mantenerme a salvo del viento huracanado con el que me castigais tú y tu abogado del diablo.

me perdono por perderme en disertaciones cuando tal vez debería estar actuando, cogiendo la vida por los cuernos en lugar de meter el dedito en la herida, una y otra vez.

me perdono, dejo todo eso a un lado, y sigo caminando.

TRATÉ DE PERDONAR

Aunque no sé si hubo ofensa, traté de perdonar.

Me dije a mi misma, que no puedes evitar amar a otra, y te deseé todo el bien.

Y entonces vino la deslealtad, la falta de respeto, el desprecio, la distancia fría, el rechazo...

Y de nuevo traté de perdonar.

Me dije a mi misma que estabas perdido, que no sabías donde andabas, que pasos pisabas, confié en tu bondad, en tu generosidad, pero sigue ausente...

Y traté de perdonar.

Ahora no es a mi a quien le faltas, es al hijo que tuvimos, este que pregunta por papá, que llora porque no estás, y ni siquiera lo llamas por teléfono. Apenas vienes a verlo, poco a poco vas desconociendo a la carne de tu carne, por desinterés, por altivez, te crees a salvo de todo error, pero estás dañando lo que más deberías amar....

Y YA NO PERDONO.

Juegas conmigo al ratón y al gato, vas dejando un rastro de pérfido egoísmo a tu paso, cada cochina semana, y no quiero hablar de ello, no quiero caer en el lamento con mis amigos, con mi familia, no quiero que nuestro hijo te perciba así de mi boca, quiero aislarlo de tu egolatría... y me descargo aquí, para que el veneno que me inyectas con cada ofensa no me enferme, no me descompense, pues aún hay mucho por lo que luchar...

Sabes que si me desestabilizas acabarás por ganar la partida, y sabes que con tiempo y la cabeza fría puedo acabar rindiéndome, y tú tienes la cabeza mucho más fría que yo... diez años has estado mintiéndome sin pestañear, diez años he estado creyéndome tus falsedades, ahora la decepción me ha debilitado, pero tengo que hacerme fuerte, por mi niño, por mí.

Después tu puedes seguir con tu vida que a mi ya no me importas, pero déjame lo que es mío, déjame mi casa, mi dignidad, deja a mi hijo crecer sin conflictos...

Y después, por mi, como si estallas tú, que yo ya he estallado bastante.

MI ESTALLIDO

escribo un blog anónimo porque mi cabeza podría reventar si no sacase pa fuera todos los demonios...

este es un exorcismo que practico conmigo misma para liberarme de esta posesión infernal que es el desamor, el resentimiento, la ira... es una voladura controlada del edificio que habité, que fue abandonado, y que durante un tiempo ha estado en ruinas... vuelo el edificio y lo hago estallar, y sobre el mismo lugar, pero con nuevos cimientos, levantaré un palacio modesto en el que vivir en paz conmigo misma y con los demás.